Un día de lluvia paseando por Avellaneda la vi en una esquina. Toda mojada y desvencijada, me miraba de lejos. La cargamos y nos la llevamos.
El tapizado era muy feo, una cuerina muy reseca pero dentro de todo se veía bien.
De atrás estaba mejor, pero las patas estaban todas engrasadas.
Asi que me decidí a desarmarla. Uf lo que me costó!! Todos los clavos estaban oxidados, las tachas ni hablar y miren lo que era adentro...
Pero con paciencia todo se puede. La desarmé por completo, la encolé, la dejé bien firme. Luego le di una mano de pintura celeste, la idea era que imitara las rayas de la tela de chenille que le iba a poner.
Y así quedó
La manchita negra en la pata de la izquierda es una mosquita que quiso salir en la foto.
Le puse tachas óxido en las patas y así quedó en la parte de atrás.
Le pinté con stencil unos angelitos con coronita y el Nº 65 que tanto me gusta.
Quedó buena no? Cómo me gustaría que la vea quien la tiró!!! Ah también le hice unos almohadoncitos para que no quedara tan Rayada. Y que les pareció?
Si quieren ver más detalles los pueden encontrar en
